Frente al ritmo desenfrenado que lleva la sociedad hoy en día,  puedo asegurar que el mejor antídoto para disfrutar de la vida es cultivar un huerto.

Hace años yo era una urbanita de pura cepa, más de ciudad que un semáforo. Para mí las patatas nacían en bolsa en el supermercado y mi mayor preocupación era vivir cada día mejor que al anterior. Era ajena a los problemas de la naturaleza, y los únicos agricultores que conocía eran los abueletes de mi pueblo de veraneo, que discutían todo el verano por el agua de regar.


La vida da muchas vueltas, muchas, y yo he acabado viviendo en un pueblo, criando mis gallinas y desde hace años cultivando mi huerto y aprendiendo de mis abuletes ( mis vecinos del huerto 😉 ).  Comparto mis experiencias con la gente, para animarles a cultivar su propio huerto o maceto-huerto. Y me he convertido en una firme defensora del medio ambiente, ya que considero que es un grave error no cuidarlo porque es nuestro futuro.

Me pegué muchos años de mi vida renegando de comer lechuga porque no sabía a nada, la acelga me daba bastante tirria y mi verdura favorita era la borraja, que sabía que llevaba trabajo cocinarla porque oía renegar a mi madre cuando preparaba la comida, pero no sabía como ni porque.

Como digo ahora vivo en un pueblo y cultivo mi propia comida, y anda que no han cambiado las cosas.

La lechuga me encanta, todos los días como ensalada, pero eso sí, ensalada de mi huerto que tiene mucho sabor, si no tengo en el huerto no compro, prefiero no comer.
La borraja me sigue encantando y seguramente seguirá siendo mi verdura favorita pero muy reñida con las espinacas. Para mi un plato de borraja bien limpia es el mejor plato del mundo. A veces cuando las limpio para cocinarlas me acuerdo de mi madre renegando…pero ponerse marrones los dedos merece la pena.
Las acelgas he aprendido a cocinarlas de mil maneras, con lo que ya no me dan tanta tirria, hasta me las puedo comer 😛

Y podría seguir enumerando y enumerando verduras y hortalizas , que felizmente consumo desde que tengo mi huerto, pero os aburriría. Sólo tenéis que quedaros con la idea de que todo lo que consumo ahora es de mi huerto, porque tiene otro sabor, mejor, más intenso; porque lo he cultivado yo, porque ha crecido gracias a mi esfuerzo y dedicación; porque yo se que enfermedades ha tenido y con que lo he tratado…….

Para mi el huerto es salud, salud a todos los niveles.

Salud para mi cuerpo porque se lo que como, se que lo que como es mucho más sano que cualquier cosa que venden que está tratado con un montón de E-2…., conservantes ….. o lo que sea. Porque conforme avanza la humanidad y se modifica más la naturaleza de los alimentos, aparecen más y más enfermedades; más y más cáncer que muchos asocian a los tratamientos químicos en los alimentos, y muchos que creen tener la verdad suprema lo niegan aunque tengan las evidencias delante de sus ojos.

Pero también es salud para mi mente porque me da paz.

Cuando estoy allí desconecto de todo, del mundo, de los problemas, de la ansiedad, de todo, desconecto de todo. Soy feliz.

Cuando estoy en el huerto se paran los relojes, no hay prisa. No hay estrés. Puedo estar rato y rato quitando malas hierbas o preparando mis semilleros, que no tengo prisa por acabar.

Estar allí en contacto con la naturaleza me aporta paz. Puedo pararme a disfrutar de la visión del huerto, con sus hierbas, sin sus hierbas, con las matas crecidas o con los entutorados tirados por el aire, y respiro. Porque da igual el mal día que haya tenido, allí ninguna planta me va a despreciar ni me va a gritar, allí soy feliz, me siento útil.

La naturaleza sigue su curso, y de una manera u otra seguro que saldría adelante sin mí, pero si les cuando las cuido enseguida me recompensan, creciendo, poniéndose más verdes, más lozanas, deleitándome con su floración, con sus frutos.

Siempre tengo cosas que hacer, puedo darle libertad a mi imaginación. No son obligaciones de vida o muerte, el mundo no se acabará si no las hago, la cosecha irá mejor o peor pero yo seguiré viva.

¿Y si hago esto? ¿Y si pruebo a sembrar lo otro?¿Y si en esta zona siembro flores?¿Los tomates crecerán bien si los siembro a la derecha de los pimientos? Podría sembrar un pistachero, he de informarme. ¿Cuándo se siembran las calas?, son mi flor favorita.

Etc

Etc

Etc

Aparecen un sin fin de oportunidades cada día, cada vez que pienso en el huerto. Y no me canso de ello.

Trabajar mi huerto, me ha hecho crecer como persona y estoy orgullosa de ello.

Mi mejor consejo en la vida:

Cultiva un huerto, algún día me agradecerás haberme hecho caso.
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