Ya han nacido de tierra todos los tomates. Faltan de salir algunos pimientos y la Lufa.

Las sandías y melones empiezan a salir ahora de la tierra, mientras que las calabazas están ya con la hoja verdadera bien grande listas para transplantar.

Los últimos tomates negros y tres cantos que hice la semana pasada todavía no asoman, pero tampoco es que quiera milagros.

Tengo pensado volver a hacer más planteros de tomates, calabazas, y alguna cosa más que me apetezca, para ir sembrando escalonadamente y recoger cosecha más tiempo, así cuando las primeras matas de tomates y calabazas empiecen a decaer, la siguientes tandas estarán en pleno auge, o al menos esa es mi idea.

Además hoy me ha llegado una carta de mi amigo José con cherrys de distinto color, y como todavía tengo alguna semilla rara de las que me gustan a mi de las cuales no he hecho plantero, tengo faena por delante, todo el año esperando y reuniendo nuevas semillas, ahora es momento de conseguir rascar tiempo de donde sea para mi afición.

Esta vez quiero hacer los planteros en bandeja blanca y por hileras, como el año pasado. Identificarlas pondré las cucharillas de café,pero escribiré la variedad con bolígrafo, porque con rotulador permanente, irónicamente al mojarse con el agua al regar con la manguera se ha ido borrando o difuminando las letras escritas.