El abono verde son plantas que lejos de agotar el suelo, lo mejoran y aportan elementos nutritivos.

Un ciclo muy usado para el abono verde es este:

En Junio se siembra a voleo semillas de abono verde, o una mezcla en su defecto. Como puede ser comida de palomos sin trigo por ejemplo.

En Julio podemos ver que las plantas de abono verde ya han germinado y están creciendo más rápido que la mala hierba.

En Septiembre podemos ver que las plantas forman una cubierta densa. Las cortaremos con una podadera dejándolas descansar encima del suelo donde las hemos cortado.

En Octubre cuando veamos que ya se han secado labraremos el terreno para mezclar los restos secos de las plantas con la tierra.

El abono verde no se debe arrancar, ya que las raíces deben quedarse dentro de la tierra y pudrirse dentro del suelo.
El abono verde al formar una capa densa sobre el suelo, protege mejor el terreno de la intemperie, de la lluvia, del sol, además de ayudar a que el suelo mantenga el agua y la humedad.

Entre los abonos verdes destacaré:

Las plantas leguminosas fijan el nitrógeno de la atmósfera por medio de las nudosidades en las raíces, causadas por las bacterias(rhizobium) Aportando este alimento natural al suelo una vez enterradas.
Yo por ejemplo este año he plantado un caballón de 12 metros de habas y otro de 12 de bisaltos(guisantes), para probar mejorar la tierra así.
Altramuz : fija el nitrógeno mejorando el suelo con sus raíces. Para tierras ácidas o neutras.
Guisante forrajero : Crece rápido y mucha cantidad vegetal. Se siembra en primavera-verano y se entierra en otoño.
Trébol : Crece rápido.Es bueno para alimentar el compost. Se puede extender invasivamente.
Habas : fijan el nitrógeno con sus raíces. Se puede sembrar asociada a cebada, avena o centeno.
– Otros : Consuelda, mijo, mostaza blanca, centeno, raygrass, colza de verano.

El centeno que enraiza profundamente disuelve los elementos minerales del subsuelo.

Anuncio publicitario